Carlos Quirós y el Libro del Yihad

CARLOS QUIRÓS Y EL LIBRO DEL YIHAD
Un olvidado arabista militar de rabiosa actualidad
Estamos acostumbrados a la ausencia de información sobre autores militares, quizás la Revista Ejército, dada su naturaleza, sea la excepción que nos trae, con la periodicidad que sus páginas permiten, cumplido recuerdo de los que en tiempos pasados adornaron con la pluma –la de escribir- sus cualidades militares, si bien en muchas oportunidades el eco literario venía apoyado en el brillo puramente militar.
En esta oportunidad, y de la mano de la búsqueda de información adicional sobre el islamismo radical,  fuimos a chocar con “El libro del Yihad” de Averroes (Córdoba 1126-Marrakech 1198), editado por la Fundación Gustavo Bueno de Oviedo y traducido del original por Carlos Quirós. Es este libro, el décimo de los 57 de que consta “el Bidaya”, el compendio de usos sociales y jurídicos en el que Averroes pauta toda la vida del creyente de acuerdo con la religión islámica, y en el que Quirós nos aporta lo relativo al Yihad, la guerra santa, según el filósofo musulmán.
De allí pasé a interesarme por la figura del autor y me encontré con una vida tremendamente atractiva, y hoy olvidada, que puede aportarnos ideas y ejemplos para los problemas que enfrentamos en la actualidad en el ámbito de muchas de nuestras operaciones exterioresIntentaremos a continuación dar un breve repaso a sus vivencias.
Carlos Quirós nace en la asturiana villa de Pola de Siero, allá por el lejano 1884, tras una infancia sin sobresaltos decide ingresar en el seminario de donde saldrá ordenado sacerdote para iniciar estudios de Derecho canónigo en la pontificia Universidad de Santiago de Compostela, para lograr el doctorado en 1908. Todo ello compaginado, al parecer desde 1904, con sus estudios autodidactas de lengua árabe.
Tras un tiempo como coadjutor de una parroquia en el centro de Asturias, gana la oposición al Cuerpo castrense y es destinado en 1910 al Batallón de Cazadores de Alfonso XII, en Vich, y en 1912 al Regimiento de Infantería de Isabel II en Valladolid. Pasa después por Madrid donde tiene oportunidad de profundizar, ya en la enseñanza reglada, en sus estudios de lengua árabe de la mano de Asín y Palacios.
Conviene hacer aquí un guiño a la Escuela de arabistas de Madrid. Iniciada por Francisco Codera y Zaidín (1836-1917),  tendrá continuación de lamano del grupo conocido como “Banu Codera” –hijos de Codera- entre los que destaca el ya citado Miguel Asín y Palacios, de quien será alumno aventajado Carlos Quirós. Es aquí donde se encauza la gran inquietud arabista de nuestro autor que fructificará durante sus 28 años de destino en el Protectorado español de Marruecos.
En ese Marruecos, a donde Don Carlos llega después de pasar destinadopor Melilla y con una solida formación, se dedica a sus labores sacerdotales pero también, y sobre todo, a profundizar en el conocimiento de la lengua árabe, no solo la literaria, sino también y quizás más importante, en la dialectal, el conocido actualmente como Dariya, y también elTamazigh/bereber. Son los años más duros de la época, el 25 de julio de 1921 se produce el Desastre de Annual, y son los años en que Abd el Krim el Jattabi logra inculcar un espíritu nacional a las tribus rifeñas que será posteriormente uno de los insumos básicos del futuro Reino de Marruecos.Son años en los que Quirós despliega en múltiples operaciones como atestigua su hoja de servicios y que también le suponen diversascondecoraciones, mientras sirve en unidades como el Batallón de Barbastro, el Chiclana, Regimiento León, los Ingenieros de Larache o directamente a las ordenes de la Comandancia General y que dan también para que en 1924 gane, con el número 1, las oposiciones al Cuerpo de traductores e intérpretes del Ejército, cambiando con ello el tipo de sus destinos militares.
Es durante este periodo, 28 años, donde la producción intelectual de Quirós se centra en dos vertientes, el personal y el institucional. En el plano personal la guía es el gran filosofo cordobés Averroes, sintetizador de la filosofía aristotélica y el Corán, al menos esa, según sus estudiosos, fue laintención del divulgador musulmán, y es ahí donde Quirós centrará sus esfuerzos durante toda su vida, con una primera gran obra en la traducción del “Compendio de la Metafísica de Averroes, hasta hoy mismo considerada la mejor traducción a nivel mundial, de una parte por el gran trabajo del coronel Quirós y de otra por el ejemplar original conservado en la Biblioteca nacional en el que éste se apoyó, seguramente el más completo de los existentes en el orbe. En los archivos de Asín y Palacios puede comprobarse su ayuda y consejo epistolar durante varios años hasta su publicación en 1919. Esta línea de trabajo averroísta la mantendrá a lo largo de su vida.
La otra vertiente, la institucional, se centra en el apoyo a la labor de las autoridades españolas en el Protectorado; labor que, como en el caso francés, implica el desarrollo de todas las funciones institucionales de un estado moderno –en el concepto de entonces, décadas del 20 y 30 del pasado siglo- y para ello Quirós, que desde 1925 es profesor de la Academia militar árabe de Tetuan, se embarcará en un concienzudo trabajo de desarrollo normativo del derecho a partir de la escuela malikí, omalekita, en la que se basa la tradición doctrinal marroquí. El objetivo es producir un Cuerpo legal en el que se puedan apoyar las autoridades, y sobre todo los tribunales, del Protectorado.
Quirós trabajará especialmente sobre el “Bidaya” de Averroes, en si mismo un Digesto que abarca prácticamente toda la vida del buen musulmán, elDar el Islam, la Casa del Islam, en el que se regula las relaciones sociales, familiares, religiosas y económicas, también las relaciones con el poder, es decir, el intramuros y el extramuros. El Dar el Harb, la Casa de la guerra, las relaciones con los infieles, que son básicamente relaciones de fricción en cuanto al afán universalista del Islam, según Mahoma y las prescripciones del Corán.
Es en este segundo aspecto donde se centra este libro décimo, “el libro del Yihad”, en el que se regula la obligatoriedad de llevar a cabo el Yihad, cómo llevarlo a cabo y cómo repartir el botín, también los tratos o acuerdos con el infiel y su cumplimiento o cuando soslayarlos.
El libro reviste una enorme importancia en la época en que Quirós lo traduce –no menor a la que le corresponde en la actualidad- pues las cabilas rifeñas son el oponente militar del Ejército español y conviene que los oficiales estén familiarizados con la mentalidad y usos de los colectivos a los que se enfrentan. A este mismo fin se enfocan las charlas que el propio Quirós imparte entre los oficiales del Protectorado y de las que tenemos noticia por una puntual información en la Vanguardia de Barcelona, que en aquella época se preocupaba por los asuntos de España, del día 4 de octubre de 1928, en la que se informa de una conferencia en Tetuán.
Tetuán era la capital del Protectorado español en Marruecos, de mucha menor extensión que el de Francia pero de no menos complejidad ya que la zona del Rif, aún hoy en día, es lugar de asentamiento de los levantiscos y belicosos rifeños lo que obligará a un gran esfuerzo militar y económico a la metrópoli hispana. Allí (1930-1940) Don Carlos comienza como profesor de la Academia militar de árabe y bereber hasta que en 1935 se cierran todas las existentes en el Protectorado –en la de Melilla ejerció como profesor el propio Abd el Krim- e inmediatamente inicia su trabajoen el Centro de Estudios marroquíes, que sustituye a la Academia militar y en el llegará a ejercer como Director. Este Centro, de gran prestigio en la época, se constituye como una autentica Facultad universitaria ya que imparte estudios superiores con un completo Currículo de cinco años de duración y se mantendrá abierto hasta 1956. Será allí donde desarrolla la mayor parte de su producción.
En 1935 publica El poder judicial y la propiedad inmueble según la escuela malekitaen 1938 Instituciones de la religión musulmana, en 1942Instituciones de derecho musulmán, todas ellas a cargo de la Delegación de Asuntos indigenasAdemás de lo anterior, se sabe, por originales encontrados en el legado familiar, origen de la actual recuperación de su figura, que elaboró trabajos para las autoridades del Protectorado sobre el derecho penal musulmán según la escuela malekitaasí como, el derecho militar según la escuela malekita.
La obra más famosa de Averroes, el Tahafut al tahafut”, La Destrucción de la destrucción, traducida tempranamente al latín y al hebreo, se basa en la refutación del libro del Al Gazhali, uno de los mayores pensadores del Islam, Tahafut al falsafat, en el que éste anatemiza la filosofía en general y sobre todo la ética y la metafísica y que servirá de base para el repudio por parte de las corrientes más reaccionarias del Islam de todo aquello que pueda sonar a heterodoxia o referenciarse a Aristóteles o Platón. Averroes desmonta punto por punto las afirmaciones de Al Gazhali, lo que le costará su puesto de Cadí de Córdoba cuando lleguen los Almohades al poder, algo así como los integristas islámicos de hoy.
El coronel Quirós tuvo tiempo para llevar a cabo esta traducción al español, no viendo la luz editorial debido a que las autoridades religiosas de la época no concedieron el nulla obstat por aquello de la prevención que provocaba la sola evocación de un filósofo musulmán, aunque fuese Averroes. Ahora, con el descubrimiento del legado familiar de Quirós, ha podido recuperarse el original y una segunda copia entre sus efectos personales que solo esperan la iniciativa y el apoyo de alguna institución para su publicación.
Llama la atención en todo este recorrido personal la falta de conocimiento que se tiene sobre este autor, sin duda un arabista excepcional, incluso en el ámbito de las Fuerzas armadas. Pareciera que hubiese sufrido una suerte dedamnatio memoriae, y así ha sido. A su vuelta de África, y ya en la reserva, Don Carlos imparte clases en la Facultad de Lenguas de Granada y más tarde en la de Madrid donde el gran gurú entre los arabistas es Emilio García Gómezpluripublicadopluripremiado, intocable y  antiguo alumno, como él, de Asín y Palacios.
García Gómez publica por aquel entonces la traducción, con prologo de Ortega y Gasset, de “El collar de la paloma” del cordobés Ibn Hazm, considerada una de las obras cumbre de la poesía islámica sobre el amor y la sensualidad. Quirós publica una columna criticando la traducción, dando a entender que se trata de un enfoque del árabe no real, doctoral, de salón, inexistente. La polémica está servida, aún sigue abierta hoy en día y en su momento dio con la humanidad de Quirós en su pueblo natal de Pola deSiero, sin clases que impartir y olvidado, o repudiado, por los círculos de arabistas.
A MODO DE CONCLUSIÓN
Dejamos sin relacionar las numerosas obras encontradas en el legado de Don Carlos, disponibles en los enlaces que se aportan al final, porque entendemos que el aspecto que nos interesa es el de su faceta como divulgador de los modos, costumbres y leyes que los musulmanes aplican en su Yihad y también los que atañen a sus relaciones sociales, económicas o jurídicas, pues ellas ayudaban a las autoridades españolas a mejor comprender y de esa manera gestionar los territorios y las gentes que tenían encomendados por medio del Protectorado.
La labor de Quirós no parece que se limitase a la del simple traductor, al contrario, parece que nos encontramos ante un personaje muy activo en diferentes campos, enseñanza, prensa, certámenes literarios y poéticos, y por supuesto la traducción y la confección de manuales o digestos, así como la impartición de conferencias para oficiales y cuadros del Protectorado.
Esta última faceta es la más importante para nosotros, en cuanto que nos señala una vía, la formativa, a la que quizás no se le presta la necesaria atención en el momento actual si tenemos en cuenta los despliegues de nuestros Ejércitos en las operaciones exteriores, y la propia ubicación de España en la ribera norte del Mediterráneo, con su proximidad a un Magreb en aparente y constante convulsión en los últimos años.
Dejando de lado los ciclos de conferencias y seminarios para cuadros superiores que parecen ya cubiertos por entidades como nuestro CESEDEN, se hace necesario potenciar los cursos de idiomas, el árabe y también el dariya –árabe dialectal marroquí- mediante el aumento del atractivo que estos tienen actualmente, y estamos pensando en unincremento de los puntos de baremo en el perfil con vistas a futuras calificaciones/clasificaciones, publicación de vacantes en organismos internacionales, e incluso con complementos salariales a las vacantes de diploma en España, esto último habitual en la época del Protectorado. Se trata de hacer atractiva profesionalmente esta especialización impidiendo que la misma pueda llegar a convertirse en una hipoteca.
Otro de los elementos a cuidar es el de las academias militares, hoy seguramente agobiadas por el peso de los créditos escolares dedicados a la enseñanza de materias civiles y faltas de espacio para las humanidades o, en este caso, el estudio de la cultura islámica en cuanto fenómeno social de total y crítica actualidad y especial interés para nuestras FAS. Es fundamental que los jóvenes oficiales y suboficiales se interesen desde el principio por lo que la estadística y la realidad nos muestran como su área de despliegue más probable y aquí, y con este fin, casi todas las iniciativas que se tomen pueden ser saludables. Ciclos de cine, clubes de lectura, conferencias, etc.… todo aporta y todo es válido.
Vayan las últimas líneas como homenaje y agradecimiento a Don Carlos Quirós, ese olvidado militar arabista, con la esperanza de que éstas sirvan para que alguna institución, militar o civil, se interese por la divulgacióndel legado que su familia supo preservar durante años a la espera de su recuperación.  


BIBLIOGRAFÍA Y ENLACES DIGITALES
Quirós Carlos, El libro del Yihad de Averroes, Fundación Gustavo Bueno, Oviedo, 2009.
Suevos Raúl, Sobre la necesidad de un curso de iniciación a los estudios islámicos, Revista Ejército nº 758, junio 2004, Madrid
Suevos Raúl, Nuestros vecinos, los bereberes, Revista Ejército nº 897, diciembre 2015, Madrid



http://www.lne.es/nueva-quintana/2009/12/16/carlos-quiros-arabista-poleso/848120.html
“La nueva España”, diario escrito, artículo sobre Carlos Quirós
http://www.filosofia.org/ave/001/a338.htm
Notas biográficas sobre Carlos Quirós
Archivo histórico del Ejército del Aire, depositario del historial del Coronel Carlos Quirós
La importancia del Libro del Yihad y su contemporaneidad
Artículo “Traductores, interpretes y truchimanes en el Protectorado
Artículo de Josefina Carabias sobre el Centro de Estudios marroquíes

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  1. http://www.ejercito.mde.es/Galerias/multimedia/revista-ejercito/2018/923//accesible/Revista_Ejercito_Accesible.pdf

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