La Diligencia
El título es probable que a la mayoría del personal,
especialmente a los de cierta edad, les traiga recuerdos de John Wayne y John
Ford, y aquella esplendida película del oeste cargada de estereotipos; pero
este escribidor está pensando en aquellas diligencias que, hasta la apertura de
la Rampa de Pajares, allá por el lejano 1885, hacían el recorrido de Oviedo a
Madrid en un fugaz lapso de cinco días, a unos precios exorbitantes para la
época, incluidos los que se acomodaban en la baca del vehículo a merced de las
inclemencias del tiempo. Era lo que había, y ya entonces era muy caro viajar a
la capital del reino.
Todo ello me ha venido a la cabeza con las últimas noticias
relativas a la puesta en marcha de la Variante de Pajares para el primer
semestre de 2023. Noticias que suponen la enésima ocasión que ello se anticipa
y que conviene poner entre comillas, por aquello de la prudencia en tiempos de
aflicción; aunque esta vez la cosa debe ir mejor encaminada pues en Gijón ya
han decidido nombrar como Rosario Acuña a la futura estación de Moreda, aunque,
precavidos ellos, también se llamará así la actual, por si acaso.
Cuando a fines del XIX se acometió el proyecto de la Rampa,
que dejaría orillados a los viejos arrieros que corrían con el peso del
transporte comercial en nuestra región, se dio un impulso fundamental a Asturias, que entonces se encontraba en pleno surgimiento del fenómeno minero y
que conllevaría a la construcción casi inmediata de los muelles de Fomento en
el pueblerino Gijón, ensimismado en su autocomplacencia jovellanista. Por
encima de aquellas traviesas iba a discurrir la nueva savia de la región, llena
de vigor, hasta su incomprensible parón en octubre del 34.
Era una obra de ingeniería espectacular, con sus casi noventa
túneles en menos de cincuenta kilómetros, sus tremendos desniveles, que la
hacían un hito en las ferrovías europeas. Un camino de hierro por el que iba a
discurrir la historia de nuestra región durante casi siglo y medio, pues aún
hoy sigue siendo la arteria principal del transporte industrial asturiano. Ye
lo que hay.
Unos hablan de cerrarla cuando se abra la Variante, de la que
no está claro su potencial logístico. Otros de mantenerla para eso, para la
logística, y también para usos turísticos. Pero lo único que está claro, por el
momento, es que, teniendo en cuenta los precios del ferrocarril de alta
velocidad, y los dos peajes que los asturianos tienen que pagar para llegar a
la capital, sin olvidar que la vía a Barcelona por Bilbao tiene el peaje más
caro de España, estamos, indudablemente, como en el tiempo de la diligencia.
Raúl Suevos
En Gijón a 22 de octubre de 2022
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