Margarita se pone digna
Estamos en plena precampaña, basta con ver los telediarios,
informativos radiofónicos y primeras páginas de los diarios escritos para tomar
conciencia de ello, quien no lo hubiese hecho aún. Vaya esta introducción como
justificación de la imparable y creciente presencia de nuestros políticos en
los medios de comunicación pública. Ye lo que hay.
El asunto, para muchos, se hace más penoso, puesto que apenas
nos hemos repuesto del cansancio provocado por las recientísimas elecciones
municipales y autonómicas, y ya estamos metidos en una nueva refriega que,
además, nos pilla entre tardanas tormentas primaverales y sofocantes calores
estivales; y lo que nos queda.
A algunos se les da mejor que a otros eso del aprovechamiento
mediático, especialmente si continúan en esa honrosa profesión, una de las
menos apreciadas por los españoles según diversas encuestas, como es el caso de
la señora ministra del ramo justiciero, missing in action, pero muy recordada
por aquellos que acuden a los juzgados y se encuentran con la huelga de
funcionarios. Pero para compensar tenemos a la veraneante candasina y titular
de Defensa.
Esta pasada semana cobró titulares con su plante al consejo
de ministros de la OTAN, según parece porque en el subsiguiente encuentro con
la industria de defensa europea no se había invitado a ningún representante
español. Faltaría más, que ella es muy suya defendiendo los intereses patrios,
como buena representante del gobierno del doctor Sánchez. Y hasta el Secretario
general de la referida organización debió salir a dar explicaciones. Vaya con
doña Margarita.
Son puntos positivos debió pensar la susodicha, que la cosa
electoral va muy apretada, pero, la prensa, que es muy taimada, siguió
escarbando en el asunto y poco después supimos que la reunión armamentística tenía
como objetivo la guerra de Ucrania y el apoyo a ese país, centrándose el tema
en las municiones artilleras, obuses y misiles, cañones de largo alcance y drones de combate;
áreas en la que España, que cuenta con una aceptable base industrial en el área
de la defensa, no tiene presencia alguna.
No estaban presentes tampoco empresas potentísimas de otras
especialidades y países para las que están previstas futuras reuniones, aunque
estos aspectos parece ser que se le olvidaron a doña Margarita cuando salió con
ánimo combativo, por aquello de la sede otaniana, a dar cuenta de su espantada
de la reunión del día siguiente.
Tiene oficio la señora, ya secretaria de estado, con rango
ministerial, en los azarosos tiempos del último gobierno de Felipe González y
el huido director de la Guardia Civil, el difunto Roldán –hay que ver qué mal
les salen los directores de la Benemérita- y que ahora, de nuevo, va en las
listas socialistas. Habrá que ver cómo nos cuenta la protesta salarial de soldados este sábado ante el Congreso.
Raúl Suevos
A 19 de junio de 2023
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