Cuando despertó, Ucranía todavía seguía allí

 

Quizás me he pasado con la entradilla, al fin y al cabo, yo estoy muy lejos como escribidor de Monterroso, el autor del que se considera el más famoso microrelato de la historia. Aunque mi dinosaurio, creo, tiene más talla o envergadura que aquel PRI, Partido revolucionario institucional, al que se supone que hacía referencia el autor mejicano.

El PRI, fue un invento que gestionó, por decirlo de forma fina, el poder en Méjico durante setenta años, y hoy, a través de MORENA, el partido inventado por López Obrador, nacido y amamantado en aquel, sigue actualmente mamoneando la nación americana. En todo caso, el dinosaurio europeo es mucho más preocupante, al menos para nosotros, europeos.

El conflicto sigue ahí, con muertos inocentes cada día, no sólo en los frentes de batalla sino también en las ciudades y pueblos del país, pero, con la llegada de Donald Trump de nuevo a la presidencia de los USA, todo parece entrar en una especie de Mar de los sargazos en el que la guerra nos llega como con sordina; como si ya no fuese tan importante ante otros asuntos de mayor enjundia. Los que interesan al cesar americano.

A Europa, a través de la OTAN, se le impone un rearme porque ahora el interés está en Asia y debemos defendernos por nosotros mismos, derogando con ello el pacto implícito que supuso el fin de la Segunda Guerra Mundial y sus corolarios. Y es entendible. También se aceptó el apoyo a medio gas que implementó la administración Biden, al que siguió la masacre de Hamas y las posteriores acciones israelíes en Gaza y Líbano, con la mochila de apoyo USA al ejército judío.

Mientras tanto, en las llanuras ucranianas, ha seguido la matanza, el heroísmo de soldados y civiles, y el desarrollo de técnicas y tácticas que han servido para mantener a raya al segundo ejército del mundo, con un millón de bajas a estas alturas, con espectaculares acciones de guerra convencional y operaciones especiales, y, con el ejemplo constante para el resto de Europa sobre lo que es el derecho de defensa.

Y ahora llega el conflicto con Irán, algo que los observadores daban como descontado, que supondrá ulteriores recortes en la ayuda, ahora previo pago, que los yanquis de Trump otorgan al bando ucraniano, y que, además, puede llevar a algunos a adormecerse en relación con lo de Ucrania, nuestro, de los europeos, real y autentico problema, y que, una y otra vez, nos llevará a despertarnos y descubrir que el dinosaurio sigue en la habitación, y tiene el rostro apenas inescrutable de Vladimir Putin; aunque a Zelensky lo escondan en Bruselas. Ye lo que hay.

Raúl Suevos

A 21 de junio de 2025

Traducción en llingua asturiana en abellugunelcamin.blogspot.com


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