Ceuta lo explica todo
Es este un verano para recordar, no sólo por los continuados
records en el alza de temperaturas, y, en general, los fenómenos climáticos
intempestivos, sino también por el desasosiego político producido por los poco
claros resultados de las pasadas elecciones legislativas. Ye lo que hay.
En el caso asturiano podríamos hablar de un “más de lo mismo”,
con lo que ello implica de previsión, aunque ésta se apoye en el lento y anunciado
decaimiento regional, si bien algunos se empeñen en ver en el turismo, impulsado
por ese cacareado cambio climático, un futuro halagüeño para la región. Cebo
para incautos.
En lo nacional todo es un sin vivir. Los números no podían
haber sido peores, y ahora todo son cábalas, a cual más estrambótica y a la par
dañina para los intereses nacionales. Es un tiempo dorado para los analistas
políticos especializados en sicología pues todo parece centrarse en auscultar
las personalidades de los líderes de los partidos, con especial interés en los
rasgos y matices del carácter del secretario general de lo que queda del PSOE,
el doctor Sánchez.
Más allá de los personalismos, el agente demoníaco de nuestra
política parece ser VOX, pues es sobre este partido donde se cargan todos los
males y responsabilidades de lo que ahora sucede, algo que parece convenir a
uno y a otros, pues así se ahorran llevar a cabo aquella autocrítica tan del
gusto de los regímenes soviéticos. VOX les ayuda a todos. También a los
comentaristas.
Los tiempos parecían socorrer a la parroquia tertuliana, en su
mayoría en periodo vacacional tras las aciagas elecciones. Todo se dejaba para
cuando el Rey se vea en el trance de nominar a un candidato a formar gobierno,
trago que se espera a la vuelta del descanso veraniego. Pero una vieja ciudad,
españolísima desde antes de la conquista de Granada, ha venido a liarlo todo.
La polarización de la política española, sembrada con mimo
desde la llegada de Zapatero al poder, y el crecientemente recuperado
bipartidismo, parecían dejar todo el asunto en un constante vituperio de “los
otros”, algo que facilitaba pasar de largo sobre los pecados propios. Muy
práctico, fácil y ventajoso.
En Ceuta, ciudad autónoma con competencias regionales, como
en el resto del país, la bicha es VOX, lo que lleva a que en la pasada
legislatura gobernase el PP en minoría para evitar el acuerdo con los
conservadores, algo que se repite actualmente y que ha llevado al PP a buscar
una alianza con el PSOE, lo que daría lugar a un caso inédito en España. Hasta
las consejerías estaban ya repartidas.
Todo se ha venido abajo por decisión del doctor Sánchez, con
el discurso de que, con el PP, a ninguna parte. Pero no se equivoquen ustedes,
no se trata de evitar tratos con la oposición, sino de evitar la posibilidad de
que el resto de país se percate de que una coalición de gobierno entre los dos
grandes partidos es posible, de que los votantes perciban que aquella Tercera
España de Madariaga es una realidad, de que el sentido común y la racionalidad
son posibles en política por encima de los intereses personalistas de los
dirigentes de los partidos, de que existe una mayoría centrista en España que
hoy está huérfana de representación, y, en definitiva, que los políticos están
para lograr el progreso y el bienestar de la ciudadanía, y no para ser su
preocupación. Así de simple.
Raúl Suevos
A 6 de agosto de 2023
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